Goma de mascar

Hoy es 20 de octubre, faltan 72 días para que termine el año y ya han pasado 293 desde que comenzó. No sé vosotros, pero yo nunca he soñado ni con pisar ni con masticar un chicle. Como casi todos, he volado, me caído por un precipicio, me han perseguido toros bravos... y otros sueños menos típicos y más inconfesables. Casi todos, desde los pueblos primitivos hasta Freud y su psicoanálisis, han dado lugar a múltiples y variopintas interpretaciones. Pues parece que pisar goma de mascar es un sueño bastante recurrente que significa que estamos vinculados emocionalmente a actos que no somos capaces de superar (si son chicles de nicotina querrá decir que quieres dejar de fumar y que no lo consigues, ¿no?) y  que masticarla representa que no dices más que tonterías. Ahora que lo pienso, a lo mejor sí que lo he soñado pero no lo recuerdo y, además, quizá sea la explicación a por qué sueño con tanta frecuencia que se me caen los dientes.