Hacer el agosto

Hoy es 2 de agosto, faltan 151 días para que termine el año y ya han pasado 214 desde que comenzó. Popularmente, hacer el agosto es hacer un buen negocio. Pues para mí, hacer el agosto es madrugar porque me da la gana y por si, de paso, veo un amanecer; es viajar en el Metro a hora punta por si coincido con Manuela Carmena, alcaldesa de Madrid, y no porque tenga que ir a trabajar; es pasear Praga; es comer camarones en cucurucho de papel y galanes en la playa, que nadie se confunda, se trata de un pescaíto típico de la costa este almeriense; es leer, si me apetece, y si no, no; es tomarme un gintonic cargado de cardamomo; es oír, una y otra vez, en el coche American pie; es intentar no subir a Instagram una foto de postureo de morritos, de mis pies en la arena, de mi ombligo en la orilla del mar o de mis manos capturando el sol o la luna; es conseguir que no me importe que sea domingo por la tarde y, mucho menos, lunes… Así hago yo mi agosto.

Comentarios

Entradas populares