Don Juan y demás

Es 31 de octubre. Dentro de 61 días terminará el año. “Por donde quiera que fui, la razón atropellé, la virtud escarnecí, a la justicia burlé…” y bla, bla, bla “(…) yo a los palacios subí, yo a los claustros escalé y en todas partes dejé memoria amarga de mí”. Aquí estoy, ensayando para la representación del Tenorio de esta noche. Así lo marca la tradición, la víspera de Todos los Santos, Don Juan y Doña Inés resucitan su amor dramático-religioso-fantástico-romántico. Disculpadme, he de seguir: “Clamé al cielo, y no me oyó. Mas, si sus puertas me cierra…”. A propósito, ahora que digo Mas, he leído que el Tribunal de Cuentas le ha dado de plazo al expresidente de la Generalitat de Catalunya hasta el 16 de noviembre para que deposite los tres millones de euros que todavía faltan de la fianza impuesta por la supuesta utilización de fondos públicos para la consulta soberanista del 9 de noviembre de 2014. Bueno, perdón, que me distraigo con cualquier cosilla, permitidme que siga: “Clamé al cielo, y no me oyó. Mas, si sus puertas me cierra, de mis pasos en la Tierra responda el cielo, no yo”.