¡Felices expectativas!

Es 10 de noviembre. Dentro de 51 días terminará el año. Cuando deseas hacer algo pasas por tres etapas: cuando lo preparas, cuando lo vives y cuando lo recuerdas. Las tres producen satisfacción e incluso, a veces, disfrutas más esa primera fase que la propia realidad, el imaginar lo que vas a vivir te hace feliz. Esto explica por qué, según diferentes encuestas, el día de la semana favorito es el sábado, después el viernes y en tercer lugar el domingo. Es decir, preferimos un día, en principio, laborable como es el viernes a un día festivo como es el domingo. Ojo, esto no significa que nos guste más trabajar que descansar sino que los viernes son el anticipo del fin de semana y los domingos ya le vemos las orejas al lunes. Por eso nos gustan tanto los viernes. Claro que si nos ponemos así, los jueves son el anticipo de los viernes, lo que puede convertirlos en un día fantástico solo con imaginar lo que nos puede deparar el anticipo del anticipo del fin de semana y así sucesivamente. Y es que ya lo decía Homero, “la vida es en gran medida una cuestión de expectativas”. Pues, ¡felices expectativas!