Libre

Es 28 de julio. Dentro de 155 días terminará el año. ¿Sabéis esos días tan merecidos de los que disponemos para disfrutar de lo que nos gusta y descansar de lo que no nos gusta tanto? ¿Sabéis ese periodo del año que es, no solo un derecho, sino también una necesidad para nuestro bienestar físico y mental? ¿Sabéis ese lapso de tiempo en el que abandonamos nuestra rutina diaria y nos entregamos en cuerpo y alma al placer de hacer lo que nos dé la gana y donde nos dé la gana, incluido el no hacer nada? Pues bien, ese momento ha llegado para mí. Claro, hablo de las vacaciones. Etimológicamente la palabra deriva del latín vacatio que, a ojo de buen latino, podemos traducir como dejar libre. Pues eso, a partir de hoy, libre como el sol cuando amanece yo soy libre, como el mar. Es más, yo añadiría, libre como el ave que escapó de su prisión y puede al fin volar…